Estábamos disfrutando de la noche estival, charlando de nuestras cosas, de la familia, de la suegra, de los problemas del primer curso en el instituto de mi hermano, de nuestro amor eterno, de las vacaciones en París, etc. En ese momento me fijé en el cielo, había una luz moviéndoSe. Me pareció un avión y pensé en lo raro que me resultaba, ya que las Hurdes no están en ninguna ruta aérea, pero no le dí más importancia. A los pocos minutos volví a mirar en aquella dirección y observé que la luz había crecido en tamaño e intensidad. En ese momento empecé a sospechar, y se lo comenté a Elena.
Lo que ocurrió a partir de ese momento ya lo conocéis. La luz se acercó cada vez mas, se hizo la luz en todo el pueblo, se "posó" delante de nosotros. Miré hacia Elena y ya no eramos nosotros, solamente estaba yo, Elena estaba subiendo las escaleras gritando de miedo. A mi el miedo me paralizó.
En ese instante me abducisteis y hasta ahora, que me devolvéis a mi vida, no se lo que va a pasar.
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